“Los niños son los que saben querer, los niños son la esperanza del mundo”
José Martí
“El amor es para el niño lo que el sol para las flores. No le basta pan: necesita caricias para ser bueno y para ser fuerte”. Concepción Arenal
Recuerdo estas frases en medio de gristos, llantos, golpes y muerte de muchos niños en este mundo revuelto, convulso y brutal por guerras devastadoras de seres humanos inocentes, impulsados y obligados a emigrar de sus tierras con lo que puedan rescatar para salvar la vida. En medio de todo esto: lo niños de todas las edades y sexos, donde sobrevivir es la primera necesidad antes que alimentarse y que en este Septiembre no irán a sus escuelas!

¿Cómo es posible contemplar el terrible panorama en los medios de difusión masiva de miles de personas y ser insencible ante el desplome de los sentimientos de humanidad, solidaridad, ayuda y socorro? ¿Quiénes son los que levantan el garrote para golpear indiscriminadamente a niños, mujeres, ancianos, jóvenes y hombres? ¿Por qué las guerras devastadoras de seres humanos? ¿Dónde está el diablito en esta panorámica? ¿Quiénes se benefician con estas guerras? ¿Cómo será el futuro de la humanidad en los próximos 15 años si continuamos con esto? ¿Cómo será la esperanza del mundo en los próximos 50 años? …..

¿Los conflictos bélicos de intereses egoístas de algunas naciones por la búsqueda de petróleo barato o del poder es más importante que la vida de la nuestra especie? La humanidad parece que olvida muy pronto las guerras anteriores, lo que costó, la desaparición de millones de personas, ¿volver a caer en lo mismo y reiniciar un ciclo ya vivido por antiguas generaciones? ¡No! creo que hay otras posibilidades a la que tenemos derecho todos! y si sucede ¡es por que nosotros mismos hemos contribuído a forjarla!
En la niñez se forma, y fragua la personalidad y autoestima de los humanos, ¿cómo serán los futuros hombres y mujeres de los 50 próximos años si sufren despiadadamente los efectos de esta guerra? o los que son discriminados por su condición de menos favorecidos en sociedades que diferencian a las personas por origen étnico y de clases.
Huyendo se Siria
“En la estación se puede encontrar gente llegada de todas las ciudades de Siria, de Alepo a Dera, y de Latakia a Deir Ezzor. Una combinación de sirios reunidos en un apeadero de Macedonia «escapando de Bashar Al Assad y del grupo yihadista Estado Islámico (EI), no hay lugar para la vida allí», denuncia Mohamed Hadad, ingeniero informático de 25 años de Deir Ezzor, que no tiene «ni idea del lugar al que iré ¿Belgica o Alemania? ¿me recomiendas otro sitio? Ahora es mi última preocupación, vivimos al día y vamos superando obstáculos hasta llegar a una meta, es una prueba de resistencia», reflexiona en voz alta antes de pedir que «por favor, cuenta al mundo cómo estamos, cómo nos tratan, que venga la prensa a Macedonia como fue a Grecia, a la isla de Kos, solo cuando salimos en los medios empezaron a tratarnos bien”.
Pero del otro lado del mundo donde la tecnología, la ciencia y la técnica coquetéan con nosotros parece algo alucinante la terrible realidad que vive una parte del planeta. ¿Cómo aportar algo para un futuro mejor?, ¿cómo cambiar la realidad que nos rodea?, ¡depende de la conciencia de cada uno, ser cómplices y ver morir el futuro, o defenderlo con dientes y garras! ….
“Prefiero el ingenuo canto de un niño a la más bella música del mundo; ese canto – como el alba – contiene toda esperanza”. Charles de Foucauld